LEUCEMIA MIELOIDE AGUDA
¿A qué población afecta? ¿Qué debo valorar?
De forma general se define leucemia cuando una determinada línea medular hematopoyética expresa una celularidad muy elevada y desproporcionada referida a un determinado estadio/s de maduración en detrimento del resto de los estadios de esa línea y de las otras series celulares de médula ósea, llegando incluso a poder suponer un predominio absoluto y también a presentar menor grado de diferenciación, lo que dificulta su identificación.

En las leucemias agudas, y en este caso en la leucemia mieloide aguda, se verán afectados los estadios más inmaduros o precursores (mieloblastos, promielocitos, mielocitos) considerándose un valor superior al 30% del total de la población hematopoyética y en el caso de las leucemias mieloides crónicas, los de almacenamiento (metamielocitos, neutrófilos en banda o cayados y neutrófilos) con el añadido de la pérdida de funcionalidad adecuada al ser células neoplásicas.
Por tanto la leucemia mieloide aguda supone un incremento mieloproliferativo que afectará a los estadios precursores de la línea mieloide (30% ) y en la gran mayoría de los casos referidos a los neutrófilos al ser la población mieloide más numerosa.
Así las células presentes que se observan en médula ósea son estadios de maduración pertenecientes a promielocitos y mielocitos, (los mieloblastos suelen ser escasos y difíciles de observar y se pueden confundir con los promielocitos) dando una imagen con mucha menor variabilidad poblacional que contrasta con la elevada riqueza y heterogeneidad poblacional de las diferentes líneas hematopoyéticas que se observan habitualmente en médula ósea.
Es importante destacar que la tasa de presentación de este tipo de leucemias es baja e infrecuente, por lo que la detección en sangre circulante de estadios inmaduros precursores mieloides, que puede ser elevada y asociada a neutropenia, de estadios adultos o alteración displásica en su morfología (formas gigantes, aumento de las lobulaciones) demanda el estudio obligado de la médula ósea.

Como ayuda al diagnóstico en sangre circulante, esta población precursora sustituye al resto de las series hematopoyéticas afectando por tanto a la población adulta final que saldrá a torrente circulatorio, provocando citopenias (anemias, trombocitopenia además de neutropenia)
Conviene siempre recordar que el análisis y recuento leucocitario no permite identificar los estadios precursores mieloides, pudiendo ser contabilizados como otro tipo celular, por lo que ante cualquier incremento leucocitario es indispensable el estudio microscópico del frotis, identificación adecuada de estadios precursores incrementados y posterior estudio de la médula ósea para confirmar el incremento mieloproliferativo de la leucemia.

En los casos en los que no se puede identificar a la población precursora se deben usar tinciones citoquímicas específicas o citometría de flujo.
Lecturas recomendadas
Atlas clínico de citología de la médula ósea del perro y el gato
Viadel Bau, Lamberto / Borràs Murcia, Daniel. Ed Temis medical (2007)
Atlas de color de citología del cáncer del perro y el gato
Fournel-Fleury, C .; Magnol, JP ; Guelfi, JF. Ed: Conférence Nationale des Vétérinaires Spécialisés en Petits Animaux, 82 Avenue de Villers (1994)