SECUESTRO CORNEAL FELINO

El diagnóstico de secuestro corneal felino comienza con la identificación de un depósito corneal oscuro de localización central o paracentral, que puede estar asociado a vascularización corneal y edema perilesional.

secuestro corneal cronico
Secuestro corneal, vascularización y edema estromal perilesional

En un principio se pensó que solo se presentaba en la especie felina, pero en los últimos años se ha demostrado que también pueden padecerlo otras especies, como el caballo, por ejemplo.
Existe una predisposición racial en razas braquicéfalas felinas, caracterizadas por una cara plana y ojos saltones, como el gato Persa, Himalaya ó Burmés.
En gatos de pelo corto, en los que no se puede comprobar una predisposición racial, se debe valorar el origen traumático de la úlcera inicial que conduce finalmente al secuestro corneal.

ulcera epitelial con bordes

En la etiología se debe considerar el origen viral, por la concurrencia del herpes virus felino tipo 1 (HVF-1), así como otros factores que puedan conducir a una úlcera corneal como: entropión, pestañas ectópicas, lagoftalmia, queratoconjuntivitis seca y úlceras epiteliales superficiales que tardan mucho tiempo en curarse.

La deficiencia en el reparto de la lágrima y la deshidratación de la superficie corneal pueden ser factores predisponentes y desencadenantes de la una queratitis que conduce al inicio de los depósitos que terminan en un secuestro corneal, por ello, se debe destacar la importancia de realizar el test de Schirmer en ambos ojos y no solo en el afectado.

Alteraciones oftálmicas asociadas al virus HVF-1
El herpesvirus felino tipo 1, se asocia directamente a lesiones en la superficie ocular, como: conjuntivitis primaria, QCS (queratoconjuntivitis seca), ulceración corneal, queratitis estromal, úlcera geográfica o dendrítica, secuestro corneal, vascularización corneal, dolor, simblefaron entre otras.

Tratamiento secuestro corneal felino. El tratamiento de esta afección corneal felina debe ir encaminada a la causa. La solución quirúrgica (queratectomía) se debe valorar cuando la respuesta al tratamiento no surte efecto o cuando se presupone como única solución. Se debe asumir la gran tasa de recidivas que presentan todos los tratamientos, incluido el quirúrgico.

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Adrián Romairone
Naci en Mar del Plata, República Argentina, el 13 de julio de 1962. Desde el año 1988 vivo en España. Tengo tres grandes aficiones: leer, la fotografía y salir al campo. Me interesa mucho todo lo que esté relacionado con el origen del perro. Me preocupa el cambio climático.