Abordaje de una herida. El lavado
1º objetivo. Reducción de contaminantes
Ante cualquier herida, sea cual sea la gravedad de la misma , el primer paso a realizar es el lavado con el fin de reducir la cantidad de contaminantes y conocer realmente su extensión y profundidad.
El primer dilema en el tratamiento de una herida surge aquí, ¿agua del grifo o suero salino fisiológico (SSF)? Está demostrada la citotoxicidad del agua del grifo pero también es necesario limpiar la herida para arrastrar el mayor número de contaminantes existentes, es decir, si utilizamos SSF y la herida es muy grande el costo de lavar correctamente la misma será elevado también. Dicho esto también hay que añadir el concepto de las ‘cinco horas de oro‘ , donde se postula que el nivel de contaminación crítico de la herida se alcanza pasadas las primeras cinco horas.
Es decir, en primera estancia y sobre todo ante heridas de gran extensión, con abundantes restos macroscópicos (restos vegetales, piedrecitas, etc),en las que han pasado más de cinco horas o heridas consideradas de inicio como contaminadas (como son las mordeduras, o traumatismos por arrastramiento en asfalto o tierra) se aplicará un primer lavado muy abundante con agua del grifo a presión. Seguidamente y tras preparar un campo aséptico para trabajar se realizarán lavados con SSF a presión.
De esta manera arrastramos la mayor suciedad posibles través del primer lavado con agua del grifo y, después, se utiliza el SSF para dejar la herida en las mejores condiciones asépticas posibles y dañando mínimamente el tejido expuesto por el traumatismo.
Lavado estéril con SSF a presión
Trabajar con una herida en condiciones de quirófano supone disponer de un mecanismo de lavado que permita contar con líquido abundante, presión y esterilidad del conjunto. Para este fin, y utilizando materiales disponibles en la clínica como una llave de tres vías, un sistema de infusión, una jeringa de gran calibre 10 a 25 ml o más y una aguja de gran calibre también (18G o más), se puede contar con un mecanismo estéril de lavado a presión con SSF.
Procedimiento
En condiciones de esterilidad, la llave de tres vías se conecta a la jeringa, a la aguja y al sistema de infusión (este último a su vez conectado al suero), exactamente como se observa en la imagen. Este mecanismo permite multiposicionar y realizar diferentes tipos de lavado. En primer lugar, podemos realizar un lavado a presión cerrando la salida de la aguja y recogiendo a través de la jeringa el suero que entra por el sistema de infusión , una vez llena la jeringa se colocan las pestañas de la llave de tres vías de manera que se cierre el sistema de infusión y se permita la salida del suero a presión a través de la aguja presionando la jeringa. En segundo lugar, este mecanismo también nos permite realizar un lavado constante sin presión cuando cerramos con la llave de tres vías la salida de la jeringa y dejamos simplemente fluir el suero a través del sistema de infusión y la aguja.